"Se va de la C, se va de la C..."


Pasaron más de 500 días desde que Carrascosa nació. Aquella fría tarde de invierno en Villa de Mayo todo parecía indicar que el proyecto aurinegro iba a morir casi al mismo momento de nacer. Se había visto un equipo prácticamente de jubilados, con jugadores abandonados, de poca movilidad y nula contracción al trabajo. Pero con el empuje del Dt Mario, que no descansó nunca en la búsqueda de players, sponsors y todo lo que hiciera falta, un año y medio despues el sueño del ascenso se hizo realidad.
El partido que selló el salto a la B fue ante Franco Canadiense, uno de los peores equipos del torneo. Y el club de Mataderos pudo definirlo rápido gracias a dos goles de Vaguinho Esteban y uno de Patricio Salvemini. Se fallaron nuevamente inmensidad de ocasiones, pero sí, ya está, CARRASCOSA SE VA DE LA C...

Además del entrenador, que dejó la vida en cada partido, no hay que olvidarse de Ezequiel Gómez, que en los últimos partidos cerró el arco y terminó siendo decisivo ante Playa Brava. Tampoco de Edu Larralde, consagrado como el mejor lateral derecho del torneo y que se perdió el final del campeonato por una lesión en su mano. Qué decir de Moccioli, que se comió crudo a Flavio Suárez y terminó erigiéndose como uno de los líderes del equipo. Y nuestro capitán, Mauro Ferrari, que si bien jugó poco por el maldito tobillo cuando lo hizo se dejó la piel. Diego Caso directamente fue el mejor del equipo; pura categoría, la rompió y finalmente hizo honor a lo que se decía de él. Charly, de mayor a menor como arquero, se transformó en un lateral izquierdo de mucho nivel en la parte final del campeonato. Y Sampayo, uno de los jugadores más queridos del plantel volvió a demostrar su crecimiento cuando más se lo necesito. Maurito Martínez vino poco pero es un histórico del plantel que tiene las puertas abiertas del aurinegro por siempre. Él también es campeón.
En el medio Paul Miquet fue un perro de presa, la rueda de auxilio de todas las estrellas, un gran refuerzo. Francisco Caso el talento y el gol en partidos claves, cuando las defensas se cerraban y los delanteros no aparecían. Franco Totono Salvemini tuvo una mitad de campeonato muy interesante y bancó la parada en todos los puestos del mediocampo. El príncipe Cubero, otro tipo muy querido por el plantel, vino siempre que se lo necesito y demostró su valía. Lo mismo el Cabezón Piedrabuena, que marcó ante Sarlanga y nos dio una mano grande cuando las lesiones nos dejaban sin jugadores. Al igual que Pesavento, que si bien dejó el equipo también forma parte de este campeonato. Y qué decir de Lucho, que ayudó un par de veces desde el arco y cuando fue arriba se despachó con un gol.
Arriba sacamos mucha diferencia, con Vaguinho que nuevamente la rompió y se llevó el trofeo de Pichichi. Jugar con él es salir a la cancha sabiendo que un gol adentro tenés. Una bestia. Y Patricio fue el símbolo de este equipo, llegando mucho al gol y jugando lesionado todo el torneo, un ejemplo. Y para el final queda la Flecha Agustín Salvemini, que volvió a marcar en partidos claves, hizo expulsar varios rivales y fue importante en el manejo de los partidos.

Lo que ayer parecía un milagro hoy es una realidad. CARRASCOSA ES DE LA B. Y el sueño continúa.
A festejar...

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