El tercer subcampeonato consecutivo no debería opacar el buen año del Deportivo Carrascosa, que siempre fue competitivo y debió haber levantado alguna copa a lo largo del 2018.
Estuvimos muy cerca en la final del sábado ante Santos Lugares pero Vaguinho, uno que generalmente acierta, no pudo convertir las dos chances más claras. Para colmo, a un minuto de llegar a los penales, con la ventaja de tener a un especialista como Fede en el arco, cometimos un error grave en la salida que nos terminó costando caro.
Fuimos por todo en ese maldito lateral y nos quedamos sin nada. Atrás queda el invicto en la fase regular (8 triunfos y un empate) y las dos clasificaciones en cuartos y semis pese a las bajas por el insólito calendario.
Orgulloso por cómo jugamos y cómo lo vivimos. Dejando el corazón en la cancha. Desde Patricio, nuestro capitán, hasta Carlos, que se hizo presente en muletas. Por eso, cabe reconocer a todos los integrantes del aurinegro a lo largo de la temporada. Habrá revancha en 2019, aunque hoy no tengamos fuerzas para proyectar lo que se viene, e iremos por más gloria.
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